La Micoterapia es la terapia que utiliza el reino Fungi, los hongos, como elementos medicinales. Los hongos terapéuticos o medicinales han sido empleados como alimento y remedio para la salud desde la antigüedad, sobre todo en Oriente, que los utilizan desde hace muchísimos siglos.
Últimamente es fácil ver por internet artículos sobre micoterapia, cómo los que hablan sobre los beneficios del Shiitake o del Reishi, o en los herbolarios es más habitual que hace un par de años encontrar suplementos a base de Cordyceps o Melena de León, por ejemplo. Y es que después de muchos años de investigación hemos descubierto que el reino Fungi es una auténtica maravilla en lo que se refiere a temas de salud.
Son uno de los mayores tesoros de la naturaleza y los organismos más antiguos del planeta, han sobrevivido evolucionando y adaptándose a los cambios en la Tierra. Se estima que en el mundo hay 1,5 millones de especies de hongos; de éstas sólo se han descrito 100.000 y apenas conocemos en profundidad unas cien.
Los más populares: Reishi y el Shiitake
Entre los más populares encontramos el Reishi y el Shiitake, pero también hay otros cada vez más usados como el Cordyceps, muy utilizado por los deportistas profesionales, la Melena de león, muy utilizado en casos de degeneración neuronal, Champiñón del Sol, el Maitake, etc.
Todos ellos son grandes moduladores del sistema inmunitario, o sea, no incrementan ni disminuyen su actividad, si no que regulan la respuesta según lo que sea necesario en ese momento.
Los hongos contienen más de 150 sustancias bioactivas en su composición. Todos ellos se caracterizan por su elevado contenido en alfaglucanos y betaglucanos, unos valiosos principios que actúan apoyando el buen funcionamiento de nuestras defensas para combatir múltiples afecciones.
También contienen enzimas, prebióticos, antibióticos naturales, vitaminas, minerales, aminoácidos, terpenos, fibra, etc. En los últimos 30 años se han publicado miles de artículos científicos y múltiples ensayos que avalan las aplicaciones clínicas de sus principios activos.
Propiedades de los hongos medicinales
El Reishi (Ganoderma lucidum) es un hongo comestible, amargo y de textura leñosa que tiene propiedades antialérgicas, antihistamínicas y antiinflamatorias gracias a que modula el sistema inmunológico y a la presencia de algunas sustancias activas; tiene propiedades antioxidantes protegiendo a las células de los daños oxidativos.
También posee una acción calmante y reguladora a nivel del sistema nervioso, y, por tanto, te será muy útil si padeces de ansiedad o insomnio. Funciona muy bien en la prevención y tratamiento de las inflamaciones crónicas.
El Cordyceps (Cordyceps sinensis) es un hongo parásito de un insecto que se encuentra en el Tíbet. Aporta energía al cuerpo y a la mente, por lo que es un hongo muy interesante si te estás recuperando de una operación o una enfermedad, si padeces depresión, si te falta energía y motivación, ansiedad,…
Según la medicina tradicional china, tonifica el Qi de Riñón, dando calma al ánimo y vigor al cuerpo. Mejora el rendimiento deportivo y aumenta la masa muscular en deportistas. Y si eres estudiante, te será muy útil porque incrementa la capacidad de concentración y la lucidez mental.
El Champiñón del sol (Agaricus blazei Murill) es un hongo originario de las regiones montañosas de Brasil. En el intestino se comporta como una esponja absorbiendo tóxicos, metales pesados, microorganismos patógenos y células muertas que luego elimina con las heces.
Por tanto, es un excelente quelador. A tenerlo en cuenta en caso de alergias y enfermedades autoinmunes porque es un fascinante regulador inmunitario. Si padeces alergias, combínalo con el Reishi para mejores resultados.
La Melena de León (Hericium erinaceus) es un hongo comestible, de aspecto “raro” que se desarrolla en la corteza de árboles muy viejos. Los efectos de este hongo son a nivel de la mucosa digestiva: ardor de estómago, gastritis, úlcera gastroduodenal, colon irritable, colitis ulcerosa, etc.
Además…. ¡ayuda a crear una correcta flora intestinal! Es también regenerador neuronal y estimula la fabricación de mielina, por tanto, es útil a nivel del sistema nervioso en caso de ansiedad, estrés e insomnio.
Y los últimos estudios científicos revelan que mejora el deterioro cognitivo (como ocurre en la demencia y el Alzheimer), mejorando la memoria, y el Parkinson. En estos casos, ¡combínalo con el Cordyceps y el Reishi!
El Shiitake (Lentinula edodes) además de ser un excelente hongo comestible (si todavía no lo has probado, te animo a que lo hagas, ¡su sabor es delicioso!) tiene efectos inmunomoduladores, antivirales y antiinflamatorios; reduce los niveles de colesterol en sangre y es un excelente hepatoprotector ya que está muy relacionado con el metabolismo del hígado. A nivel cardiocirculatorio tiene efecto hipotensivo y reduce las situaciones de riesgo cardiovascular.
El hongo Maitake (Grifola frondosa) actúa básicamente sobre el sistema inmunitario siendo el hongo de elección en el tratamiento con quimio y radioterapia. Aunque también actúa a nivel metabólico reduciendo los niveles de colesterol y triglicérdios y controlando la tensión arterial (es un gran preventivo de los efectos colaterales de la obesidad).
Para no extenderme demasiado, en este artículo he hablado sobre las propiedades principales de cada hongo medicinal, pero cada uno de ellos tiene muchísimas más.
No dudes en apuntarte a nuestro curso de Micoterapia si quieres adentrarte en este maravilloso mundo de los hongos terapéuticos.
Otros artículos que te pueden interesar: